La literatura sobre Indicaciones Geográficas (IGs) considera una gobernanza fuerte y bien desarrollada como factor crucial de éxito para cualquier proyecto IG.

La gobernanza puede definirse como el sistema mediante el cual las organizaciones son dirigidas y controladas, rindiendo cuentas de su gestión frente a sus diferentes públicos de interés y la sociedad en su conjunto (Comforth, 2003). La literatura sobre gobernanza para IGs desafortunadamente no ha profundizado suficientemente sobre la necesidad de categorizar la gobernanza y medirla en función de atributos o características deseadas. Así, dentro de la concepción de ESG la “G” de Gobernanza busca verificar que las empresas u operaciones privadas, cumplan con parámetros aceptables de ética empresarial, comportamiento competitivo, gestión del entorno legal y regulatorio, gestión de riesgos de incidentes críticos y de riesgos sistémicos, y mecanismos de denuncia de irregularidades . La FAO hizo un esfuerzo similar enfocado en unidades de producción agrícola , que también incluye elementos como ética corporativa, responsabilidad empresarial, participación, estado de derecho y gestión holística.

En el caso de las organizaciones de IG, estas deben articular intereses que van más allá de la esfera puramente privada, por lo que la definición de gobernanza se torna más compleja, debido al mayor número de partes interesadas ante las cuales la organización debe rendir cuentas. En este sentido, la gobernanza de una organización de IG se ocupa de “sistemas complejos que abarcan mecanismos, procesos, relaciones e instituciones a través de los cuales los individuos y los grupos articulan sus intereses, ejercen sus derechos y obligaciones y median sus diferencias” (Vandecandelaere et al., 2009).

La reciente publicación de FAO-oriGIn tiene una aproximación colectiva de la gobernanza, haciendo énfasis en los siguientes temas y tópicos. El aporte innovador de esta aproximación es tanto conceptual (entender con mayor profundidad los componentes de la gobernanza, y que no basta con tener uno de ellos para asegurar una gobernanza efectiva) sino el desarrollo e indicadores de gobernanza que puedan ser compartidos con públicos clave y que, además de la medición y el mejoramiento continuo que un seguimiento con base en indicadores supone, permita documentar ante terceros la representatividad de las organizaciones IG y su relevancia como aliados para el desarrollo del territorio. Es, en suma, una aproximación que incluye tanto elementos de gestión como elementos que podrían derivar de la ciencia política dado su impacto en lo colectivo y comunitario. La presentación propuesta aborda este último tema y las formas de medición de la gobernanza y sus potenciales beneficios tanto de organizaciones de organizaciones IG como de cualquier otro esfuerzo de acción colectiva.